El régimen de estimación objetiva para la tributación del IRPF (más conocido como sistema de “módulos”), estaba en el punto de mira y se esperaban cambios para este próximo año.
Pues bien, parece que el sistema de módulos se mantiene en 2021 con las mismas condiciones.
El pasado 4 de diciembre, el Ministerio de Hacienda publicó la Orden HAC/1155/2020, en la que desarrollaba los regímenes de tributación del IRPF y especificaba que, para el sistema de módulos:
- Se mantiene la cuantía de los signos, índices o módulos y sus instrucciones de aplicación.
- La reducción sobre el rendimiento neto de los módulos sigue siendo del 5%.
- En lo referente al IVA, los módulos aplicables en el régimen especial simplificado en el año anterior, también continuarán igual.
¿Qué pasa si en 2020 renunciaste temporalmente al sistema de módulos?
Entre las medidas para apoyar la economía y el empleo que el Gobierno puso en marcha durante el estado de alarma, se encontraba la de flexibilizar el modo de tributación de los autónomos.
Con la paralización de la economía, el sistema de módulos podía suponer para muchas pequeñas empresas la obligación de pagar el mismo IRPF que siempre con un nivel de facturación muy bajo y, por lo tanto, muchos menos ingresos.
Así, con las nuevas medidas, los autónomos que tributaban mediante el sistema de módulos, podían pasarse de manera temporal (durante 2020) al régimen de estimación directa.
Si es tu caso y decidiste cambiar de sistema tras la aprobación en abril del Real Decreto -ley 15/2020, puedes volver a tributar por módulos el próximo año, siempre que sigas cumpliendo los requisitos necesarios.
Si, por el contrario, no cambiaste de sistema entonces, pero ahora quieres pasarte al régimen de estimación directa, tienes hasta el 31 de diciembre para renunciar a tributar por módulos.
¿Qué sistema de tributación me beneficia más?
En función de cómo sea tu empresa, te resultará más conveniente acogerte a uno u otro sistema de tributación.
Ventajas de la tributación por módulos para autónomos
El sistema de tributación por módulos se creó para facilitar el pago de impuestos a algunas empresas para las que llevar una contabilidad directa era especialmente difícil.
Los autónomos que tributan por este régimen no lo hacen en base a lo que facturan, sino a otros criterios que fija Hacienda. Esto facilita mucho las cuentas. Es más sencillo saber cuánto hay que pagar por módulos cada trimestre y evitar sorpresas desagradables por errores de cálculo o mala organización.
Pero recuerda que existen unos requisitos para poder acogerse a este régimen de tributación y unas obligaciones fiscales para los autónomos en el sistema de módulos.
Ventajas de la tributación por estimación directa
Así como no todo el mundo puede acceder al sistema de tributación por módulos, el régimen de estimación directa es el más generalizado, y no existen restricciones para acogerse a él.
¿Su principal ventaja? Se paga IRPF únicamente por lo que se gana. Es decir, si un trimestre no tienes beneficios, la declaración será negativa.
Eso sí, recuerda que las medidas de flexibilización para pasar del régimen de tributación por estimación objetiva al de estimación directa son, en principio, temporales. En general, si renuncias al sistema de tributación por módulos tendrás que permanecer en el régimen de estimación directa al menos durante tres años.
Además, la tributación por módulos y estimación directa a la vez, son incompatibles. Por eso, si tienes la posibilidad de acogerte a cualquiera de las dos, te recomendamos valorarlo bien antes de tomar una decisión.