El copywriter es un oficio con pujanza en el mundo de la comunicación y el marketing digitales.
Los copywriters (también conocidos como redactores de contenidos o redactores publicitarios) son cada vez más demandados por empresas que buscan mejorar sus estrategias de contenidos y de marketing online. Son un valor, qué duda cabe, y este espacio es una muestra clara de ello (ejem, modestia aparte).
¿Pero cómo factura un copywriter? ¿Necesita una plantilla de factura específica? ¿Es la facturación de un copywriter igual a la de cualquier freelance o autónomo?
Contenidos de una plantilla de factura para copywriters
En primer lugar, aclaremos que en este espacio estamos hablando de copywriters freelance o autónomos (no asalariados). Por lo que los contenidos o requisitos de un modelo de factura son los mismos que los estándares para cualquier autónomo.
Como los clientes de los copywriters suelen ser empresas o profesionales, lo único que ha de tener en cuenta el copywriter es, en primer lugar, que tiene que aplicar la retención del IRPF.
Lo segundo a tener en cuenta es el tipo de IVA.
Para no confudirnos, vayamos por partes:
- Tienes (te pasaremos a llamar de tú a partir de ahora) que aplicar una retención del 15% en todas tus facturas (en caso de nuevos autónomos, puedes retener un 7% del IRPF durante los tres primeros años).
- El tipo de IVA suele ser del 21% (el general), que es el que aplica para cualquier servicio de redacción digital (atención: en caso de que te toque un trabajo de redacción impresa - aunque esto sea un poco mear fuera de tiesto - no se aplica IVA a la factura. Más detalles en "¿Cómo es un modelo de factura para periodistas freelance?").
Otras cosas que un copywriter ha de tener en cuenta aparte de la plantilla de factura
Está claro que para hacer facturas has de hacerte autónomo. Y con hacerte autónomo no estamos evocando el sujeto kantiano (perdón por la pedantería), sino con darse de alta de autónomo en la Agencia Tributaria.
Sí, hablamos de fiscalidad, y no de metafísica (luego ya hablaremos de redacción de contenidos, si acaso).
Y como hablamos de fiscalidad, también responderemos la pregunta del millón de muchos profesionales creativos y no tan creativos de este mundillo: ¿en qué epígrafe has de darte de alta?
Si eres nuevo en esto, lo del epígrafe te puede sonar a chino. Deja que te lo traduzca: estamos hablando del Impuesto de Actividades Económicas (IAE), al que todo profesional autónomo (y tú también lo eres o lo vas a ser) se ha de dar de alta al rellenar el modelo 037 de alta de autónomos.
En el muy recomendable blog para copywriters "El blog del redactor freelance", se ofrecen tres posibilidades (aviso: no hay un epígrafe específico para copywriters o redactores):
- El grupo 861 (pintores, escultores, artesanos y otros artistas). Este es el que recomienda la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) para los periodistas.
- El grupo 751 (profesionales de la publicidad, relaciones públicas y similares). Quizá es el que más te convenga si lo tuyo es el copywriting puro y duro (es decir, el publicitario).
- El grupo 774 (traductores e intérpretes). En caso de que también ofrezcas servicios de traducción, este epígrafe no es mala idea.
Al no haber un epígrafe específico para la profesión, Hacienda puede aceptar barco como animal acuático. No importa, siempre y cuando no te salgas de estos parámetros (vamos, que no hagas excentricidades como darte de alta como profesional de la sanidad).
Y eso es todo. ¿Quieres un recomendación final? Porque ya que has venido a parar aquí, te recomiendo que uses un programa de facturación y que dejes Word o Excel para otras cosas.