Que un autónomo no puede prescindir de un programa de facturación es, a estas horas del partido - y desde este espacio, qué te vamos a decir -, una verdad palmaria.
Ahora bien, ¿es necesario que tenga contabilidad? Y si es así, ¿qué tipo de contabilidad? ¿Se puede prescindir de ella?
La contabilidad del autónomo
Los autónomos tienen obligaciones contables, como todo aquel que lleva a cabo una actividad profesional o económica. No obstante, sus obligaciones contables son bastante laxas, si se nos permite la expresión. Esto es lo que dice la Agencia Tributaria:
Lo que determina las obligaciones contables de un autónomo son el tipo de actividad y cómo tributa por el régimen de IRPF.
Si tributa por estimación directa, ya sea normal o simplificada, tiene las siguientes obligaciones:
- Libro de registro de ingresos.
- Libro de registro de gastos.
- Libro de registro de bienes de inversión.
- Libro de registro de provisiones de fondos y suplidos.
Si tributa por estimación objetiva (o módulos):
- Libro de registro de bienes de inversión (sólo aquellos que deduzcan amortizaciones).
- Libro de registro de ventas e ingresos.
Esto quiere decir que todo aquel que esté obligado a hacer facturas y tenga gastos relacionados con su actividad deberá llevar siempre un registro de estas actividades.
Entonces, ¿mejor un programa de facturación con contabilidad?
Vistas las obligaciones contables de un autónomo, está claro que hablar de programa de facturación y de contabilidad es una tautología: todo software de facturación permite el registro de ingresos y de gastos, por lo que el autónomo ya se puede dar por satisfecho.
Lo importante, ahora bien, es cómo se organicen esos ingresos y gastos, pues las obligaciones contables del autónomo tienen un objetivo meramente fiscal para la Agencia Tributaria: que a la hora de declarar los impuestos, los declare todos.
En otras palabras: lo deseable es que el programa de facturación registre tanto las facturas emitidas como las de compra, así como que desglose correctamente el IVA de las facturas y las retenciones de IRPF (solo para aquellos que estén obligados a aplicarlas en las facturas y luego declararlas).
¿Cómo registra el programa de facturación de Debitoor la contabilidad de un autónomo?
Debitoor permite el registro de todos los ingresos (facturas y otros ingresos) y gastos de un autónomo. Toda la información se guarda en su respectiva sección, por lo que el autónomo la pueda consultar cuando lo desee.
Además, permite la exportación de los datos de facturas y gastos en archivos de Excel, por lo que uno puede llevar su libro de ingresos y gastos perfectamente para hacer sus respectivas declaraciones de impuestos.
Los listados de facturas (de venta) y gastos en Excel aparecen desglosados por contenido, incluyendo las cuotas tributarias que se aplican en cada factura o gasto así como el tipo impositivo.
En definitiva, Debitoor ofrece todo lo que un autónomo necesita en términos de contabilidad y de la forma más cómoda y segura.